Esta navidad fue bastante especial, no sólo por el hecho de padecer una terrible pandemia que nos afecta, sino porque mi hija al estar más grande disfrutó su segunda navidad.
A diferencia de la primera fiesta navideña Emma está más despierta, inteligente y ya sabe reconocer quién es su madre, sus abuelos y por supuesto a mí, a veces me dice papá o “teto”.
Y vaya que es cierto esa frase que “la navidad es de los niños” porque Emma quien al principio no entendía que sucedía terminó por comprender que nochebuena será siempre un momento especial, una noche que esperamos no se duerma temprano y que la mayor satisfacción es ver dibujada una sonrisa en su rostro.
Todos fuimos niños, esperábamos el juguete que alimentábamos por largo tiempo en aquella ilusión navideña y no nos correspondía reflexionar sobre las cosas buenas/malas del consumismo o el neoliberalismo imperante en nuestra sociedad que ahora te lo recuerdan por diversas redes sociales en memes.
Cuando ves a tu hija alegrarse maravillosamente con una simple máquina que hace burbujas, animalitos de plásticos o alguna que otra muñeca ¿acaso piensas en el dinero? ¿te preocupas cuánto gastaste? ¿consideras que hubieras gastado más o menos?
Al menos no pensé en el dinero, lo que sí pensé fue si mi bebé estaría despierta hasta medianoche para abrir los regalos con ella y no esperar al otro día.
Por cierto, para fortuna de todos Emma no sólo despertó antes de las doce, sino también jugó hasta pasado las tres de la mañana y hubiera jugado más sino fuera porque nosotros ya estábamos cansados y queríamos dormir jaja.
Sé que hay muchos padres e hij@s que no tuvieron la oportunidad de pasar una linda navidad por culpa de esta pandemia, personas que ya han muerto, que están contagiadas, aisladas, que tuvieron que trabajar o que están lejos por diversos motivos, por esa razón estoy agradecido.
Estoy agradecido por estar con mi hermosa hija día a día, verla crecer, ver cómo disfrutó cada regalo que recibió en esta navidad y por sobre todas las cosas, agradecido a la vida por darme la oportunidad de ser padre.
En esta pandemia, soy afortunado, de verdad. Compartir una gran nochebuena y navidad ha sido el mejor de los regalos, pero sobre todas las cosas, ver a mi hija crecer en cada aspecto, ha sido el mejor regalo de todos…aunque una play5 no hubiera caído mal.
Viernes, 25 de Diciembre de 2020.
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