De acuerdo a diversos registros históricos no hay seguridad del nombre verdadero ni de la fecha de nacimiento de la poeta oriunda de África quien fuera secuestrada de su tribu a la edad de siete años y posteriormente vendida por traficantes que la embarcaron en la goleta “The Phillis” (que originó su nombre occidental) con destino a desconocidas colonias británicas en América para ella.
“Phillis” (1753-1784) fue vendida a la familia de John Wheatley, reconocido comerciante de Boston, para ser la criada (o esclava) de su esposa, pero tuvo la fortuna de recibir una gran educación que le permitió aprender a leer y a escribir en inglés, algo que abrió el camino para aprender otros idiomas después y convertirse en un caso casi único durante una época de esclavitud.
Phillis al crecer se vio influenciada por creencias protestantes que adoptó cuando su familia se volvió protestante y es algo que se puede apreciar en su obra poética como también cuestiones sociales durante el siglo XVIII en EEUU, y de sus sentimientos respecto al continente que la vio nacer.
“Poemas sobre varios temas, religiosos y morales (1773)”, según algunos causó el interés del histórico primer Presidente de EEUU, George Washington, del legendario intelectual francés “Voltaire” y de la Condesa Seline Hastings, entre algunos ilustres nombres, y se transformó de paso en su única obra publicada que parecía la conduciría hasta lo más alto en el escenario social y cultural.
Sin embargo, el destino preparó otro escenario para la primera escritora afroamericana en EEUU, tras un frustrado matrimonio, la pérdida de dos hijos y en una época marcada por el racismo y la intolerancia, terminó muriendo en la misería absoluta un 5 de diciembre 1784, a la temprana edad de tan sólo 31 años.
Poesía de Phillis Wheatley
En cuanto a su poesía, esperamos que te guste esta pequeña selección que hemos escogido para ti y que debes tener en cuenta se escribió hace más de dos siglos y que nos permite aún recordar a esta gran poeta afro americana.
“Sobre ser traídos de África a América”
Fue la misericordia la que me trajo desde mi tierra pagana,
le enseñé a mi alma ignorante a entender
que hay un Dios, que hay un salvador también:
no lo conocía ni lo buscaba, me redimió.
Algunos vieron nuestra raza azabache con ojos de desprecio,
“Su color tiene un tinte diabólico”.
Recuerden, Cristianos, Negros, negro como Caín,
puleté y únete al tren angelical.
“Un himno al crepúsculo”
Tan pronto como el sol abandonó el este central
el trueno repicó y sacudió la llanura celestial;
¡Esplendor majestuoso! desde el ala del céfiro,exhala el perfume de la primavera en flor .
Suave murmullo de los arroyos, las aves renuevan sus notas,
y a través del aire su música flota mezclada
¡A través de todos los cielos qué tintes tan bellos se extienden!
Pero las glorias al oeste, el rojo en lo más profundo:
Así que muchos de nuestros pechos con cada resplandor virtud,
¡los templos de vida de nuestro Dios en la tierra!
Lleno de la gloria de aquel que da la luz,
y corre el azabache las cortinas de la noche,
que le permiten dormitar plácido, calmo, de su mente cansada,
en la mañana despierta más placentero, más compuesto;
así serán las labores de el día que comienza
más puro, más reservado de los lazos del pecado.
Cetro de plomo de una noche que sella mis ojos soñolientos,
entonces cesa, mi canción, hasta que justo se hubiere erguido la Aurora.
“Imaginación”
¡Imaginación! ¿Quién podría cantar tu poderío?
¿Y quién describiría la velocidad de tu carrera?
Elevándonos a través del aire para encontrar la radiante morada,
El empíreo palacio del tronante Dios,
Sobre tus alas aventajamos al viento,
Y dejamos atrás el rodante universo.
De estrella a estrella el ojo mental vaga,
Mide los cielos y recorre las regiones superiores;
Allí en un panorama abarcamos el magnífico todo,
O con nuevos mundos asombramos el alma infinita.
Domingo, 20 de Febrero de 2022
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