Breve  historia de El Semáforo

el semáforo
Una foto del baúl de los recuerdos.

En este artículo en particular deseo dar cuenta la breve experiencia  de mi medio de comunicación independiente llamado El Semáforo-Misceláneo Digital.

Elsemaforo.cl nació en Belloto Norte, de la ciudad de Quilpué a fines del año 2016. Todo surgió de la manera  más espontánea posible y sin hacer aquellos análisis FODA, estudio de mercados o esas  cosas por el estilo.

Por cierto, soy Sergio Muñoz, periodista de profesión y futuro escritor (tengo dos borradores llamados “Entre el Cenit y el Abismo” y “Cuentos para Emma” -mi hija-), y soy el flamante creador de este web site que ya tiene sus par de años.

Como decía, esto nació de la manera más linda posible y  con el único fin de escribir cosas o al menos hacer un poco de periodismo: entrevistar,  contar ciertos sucesos  o subir algún artículo escrito por un amigo.

La principal anécdota de todo esto es que El Semáforo apareció en el momento en que me encontraba prácticamente quebrado económica y emocionalmente, amigos míos.

En cuanto a lo primero, estaba sin trabajo  por ende no recibía ingresos algunos  y como el infortunio nunca se asoma solo con él comenzaron las llamadas de los bancos  y cajas por dineros que debía comenzar a pagar, el CAE por ejemplo.

En cuanto a lo segundo, estaba con los ánimos por los suelos al sentir que había estudiado la carrera equivocada (Periodismo) y que no me generaba nada positivo (ni plata, contactos, satisfacción, ilusiones, etc.) ni entusiasmo alguno.

Por suerte contaba con la importante ayuda de mi pareja y madre de mi hija, Martina, quien me decía que no fuera hueón por pensar pagar el CAE jaja y que no me preocupara por estar cesante, ya que es algo que a todos nos pasa en algún momento de nuestras vidas.

Así que creí en sus palabras  y le hablé de crear un espacio para hacer un poco de Periodismo, dado que como las oportunidades no aparecían, sentí que debía crearlas yo mismo.

Con los últimos pesos que me quedaban en mi bolsillo, literalmente hablando, pagué el hosting y dominio web para constituir lo que más tarde se trasformaría en mi súper página periodística  y oriunda de la ciudad del Sol, porque en Valpo levantas una piedra y salen páginas webs.

Soy un hombre que imagina muchas cosas, vivo de sueños, de situaciones que a veces no ocurren, pero al menos divierto mi mente, me divierto un rato y proyecto mi vida a ello, así que más o menos imaginé que causaría toda una sensación en mi entorno después de crear  elsemaforo.cl

Pequé de ingenuo, subestimé la realidad, no contemplé los desafíos en el mundo de las redes sociales ni mucho menos estaba preparado para todo lo que iba a enfrentar a partir de ese momento.

Porque me adentré, sin quererlo, al mundo de un generador de contenidos o más pulentamente dicho en inglés “community manager”, algo que en verdad me gusta mucho hacer.

Si desean saber queridos semaforinos,  yo siento que apostar por mi humilde espacio digital ha sido una de las inversiones más placenteras en mi vida como lo es el emprendimiento.

¡Y vaya que he aprendido mucho en este camino! No hay mejor escuela que lanzarse al agua uno solo, sin ayuda ni flotadores de por medio.

Por esas cosas de la vida, todo aquello que critique en la escuela de Periodismo lo tenía que poner en práctica para dar forma y sentido a mi medio de comunicación, como lo es sobreexponer nuestra propia imagen, subir cosas banales o tendencias, replicar contenidos, etc.

Siempre recordaré que comencé con 30 seguidores y ahora tengo miles (aunque no son tantos jaja). Inicié compartiendo  largos textos  escritos con mucha pasión que  creía causarían furor, aunque lamentablemente nadie los leía ni mucho menos los comentaba.

Descubrí  entonces que mi contenido no estaba tan mal, lo malo es que no sabía cómo llegar a un público, porque desconocía mi público objetivo (algo tan básico y elemental).

De igual modo, con el pasar del tiempo, me estaba re encantado con mi carrera, aquella que no disfruté a lo largo de mis años de estudio, además había encontrado un humilde trabajo, así que poco a poco fui dejando atrás aquellos tristes pensamientos y mi forma de ser también comenzó a cambiar.

En esta aventura con mi medio de comunicación me ha pasado de todo, desde aquel socio que me dejo días antes de lanzar el website,  perder todo un año de trabajo por la caída de mi operador de hosting, de perder concursos del estado, de sufrir diversas caídas de la página, de nunca usar las tarjetas de presentación que mando  a imprimir y tantas otras cosas más, sólo puedo decir que me siento muy feliz de toda esta experiencia que he ido adquiriendo.

Para mí es muy hermoso cuando me cito con un entrevistado (o lo hacía antes de la pandemia) para poder conocerlo y dar a conocer después su historia a mis lectores, en donde muchas veces mi espacio se convierte en la primera experiencia periodística de mis entrevistados.

Sé que aún falta por vivir muchas experiencias, ya sean buenas o malas, pero siento que voy por buen camino, tal vez sin mucha prisa y sin hacer mucho ruido, pero todos tenemos nuestras formas de hacer las cosas y esta es la mía.

Porque uno de los objetivos de elsemaforo.cl aparte de poder hacer un poco de periodismo, escribir y ser leído, era poder demostrarme a mí que puedo hacer cosas que me proyecto.

Además, esta experiencia me serviría para entrevistas laborales, en donde mis entrevistadores se sientan atraídos por todo el trabajo que he realizado desde la más absoluta precaridad, a veces todo es cuestión de voluntad nada más.

Quienes me han entrevistado para un cargo importante me han felicitado y a su vez se han asombrado por lo que he creado, algo que me hace sentir mucho orgullo y da cuenta de lo que he dicho en el párrafo anterior.

A veces pienso que si  esto hubiera nacido durante mis años como estudiante de periodismo, tal vez estaría en otro nivel elsemaforo.cl, poseería la ayuda de muchos colegas y quién sabe, pero bueno, todo pasa a su debido tiempo y debemos aceptar las cosas como son, ¿o no?

Hoy, es 2020, en medio de esta pandemia mi sitio web en estos últimos meses hizo una gran pausa en muchos aspectos (necesitaba descansar, reflexionar, distraerme o qué se yo), aunque desde ahora retomamos con otros aires y muchas fuerzas.

En este camino, como señalé que comenzó en 2016, en donde partí prácticamente solo ahora es diferente y cuento con un gran equipo que pueden conocer aquí, quienes me colaboran de manera desinteresada y con mucho cariño, dando a El Semáforo un sentido muy familiar.

Obvio que tengo grandes sueños y esperanzas en todo esto,  como por ejemplo ganar un fondo del medio para realizar un lindo proyecto comunicacional que nos dejaría bastante orgullosos.

También sueño que mi espacio se convierta en algo importante no solo para mí, sino para todos aquellos que requieran de él, como un instrumento para llegar a la mayor cantidad de personas posibles y vivir experiencias, me refiero a estudiantes, practicantes, aficionados o mismos profesionales de las comunicaciones.

Deseo que todo el mundo conozca a elsemaforo.cl  y para ello debo trabajar muy duro como lo he hecho todo este tiempo, contrariamente no sueño con ganar millones, solo sueño que mi espacio sea reconocido por su importante labor para la comunidad.

Espero no los haya aburrido con este express relato de la historia de mi medio de comunicación, me esforcé por hacerlo bien breve, y les deseo de todo corazón que tanto ustedes como sus familias y amigos más cercanos se encuentran bien en medio de esta terrible pandemia que a todos nos afecta por igual.

No importa el momento, el lugar, los miedos o las dudas, simplemente hazlo, tírate al agua, aprende en el camino, espera equivocarte, disfruta aprender cosas nuevas que vendrán, siéntete orgulloso por cumplir tu sueño, y sobre todas las cosas, sé constante, porque todos empezamos con muy poco y después, no podrás creer todo lo que has construido.

Sergio Muñoz

Director & Creador de El Semáforo-Misceláneo Digital

Sábado, 25 de Julio de 2020

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