VIÑA DEL MAR-. El Mosaico es la unión de diferentes piezas como la piedra, la cerámica o vidrios de diferentes formas, colores y tamaños para crear figuras decorativas, geométricas o abstractas.
Eso es lo que podemos apreciar en la hermosa casa taller de nuestra entrevistada, quien descubrió su pasión por la creación cuando apenas era una niña de quince años, luego de transformar su habitación más de diez veces.
Hoy, el tiempo ha pasado y se considera una artista inquieta, con deseos de hacer arte, de crear con sus manos y aprender aún más, pues te invitamos a conocer un poco de su historia.
Angélica Weitz Salazar, es viñamarina de tomo y lomo, estudió Diseño Textil en la Universidad de Playa Ancha, por donde pasaba la antigua micro “1” (ahora 602), según nos cuenta.
Mientras se encontraba pololeando, ella y su pareja deciden viajar hasta la sexta región y es así que conocen el hermoso pueblo de Lolol (de la comuna de la provincia de Colchagua).
-¿Qué cosa le llamó la atención de Lolol?
-Es pueblo muy hermoso, era lo que estábamos buscando con mi pareja y por esa razón nos quedamos.
-En Lolol, tú podías ver lolos de dieciocho años, pero después la edad de las personas saltaba a los 45 años, porque la otra gente (del medio) estaba estudiando o trabajando, fuera del pueblo.
-Vaya, que extraño.
-Sí. Prácticamente, no había personas de treinta años y yo tenía casi esa edad para esa época y no había mucha gente creativa…así que llegué a ser directora en Teatro…
-¿Cómo fue la experiencia en el teatro en Lolol? ¿Usted estudió teatro?
-Jaja. Lo que pasa es que había un grupo de chicos que ensayaban pero no poseían ninguna dirección, y yo los vi en una presentación y me encantaron.
También cuenta que se quedó viviendo prácticamente diez años en la sexta región, mudándose constantemente, pero de todas maneras ella logró incursionar en variados oficios.
Aparte de participar en Teatro, logró hacer trabajos de investigación en Lolol, como piezas audiovisuales para una canal de Santa Cruz, usando videos analógicos.
Todo esto en paralelo, mientras su fiel compañera, un horno de 1200° la acompañaba con cada cambio de casa, para ir practicando vitrofusión, que es fundir el vidrio para hacer todo tipo de moldes, tales como ceniceros, platos, piezas colgantes, a diferencia del vidrio soplado, que es otra variante, explica.
El descubrimiento en el Mosaico
-¿Cuándo regresó a Viña?
-Se dio por muchas cosas, empezando que mi marido quedo sin pega, después cuando uno de mis hijos cumplió cinco años, necesitaba ir al colegio y no me gustaban los recintos de allá.
-Además, nos planteamos con mi marido hacer cosas nuevas, volver a estudiar, perfeccionarnos, y pensábamos que acá (quita región), tendríamos más oportunidades.
-Pero al final no hicimos ninguna de las cosas que te mencioné jaja porque al regresar a Viña, quedé embarazada, esperando al tercer hijo.
-¿Así nació este taller?
-Sí. Al principio era sólo vitrofusión, pero en otra casa. Un día, se cayó el muro de mi casa, el cual poseía palmetas, con azulejos de color blanco y se partió.
-Entonces, empecé a tocar y tenía nueve azulejos, estaban sueltos, y fue entonces que partí a comprar un espejo, lo pegué con belcrón y de ahí no he parado más…desde 2007.
-Pero en 2012 me formalicé como en mosaico, como artista de primera categoría y fue cuando me gané un Sercotec, en capital semilla.
-Jaja pero fue un año del terror, ya que la empresa que hacía el nexo entre Sercotec y el ganador del premio se cayó…así que estuve cuatro meses esperando mi premio.
-¿Cómo puede definirnos su taller?
-Práctica y enseña dos técnicas, vitrofusión y mosaico. Las cuales mis estudiantes pueden aprenderlas juntas o separadas, como quieran.
-El mosaico, no necesariamente usa cerámica, como puedes observar en mis trabajos, he usado cortezas de árboles, errores de vidrios que se producen en el horno…
-Hasta esas incidencias poseen nombre…
-Pues sí, porque al final son piezas para mosaico, ya que es la unión de varias cosas para crear algo nuevo.
-¿Qué referentes posee en el mosaico?
-Mmm, técnicamente no, pero me quedo con lo que me dijo alguna vez un profesor de historia en diseño, “yo miro todo”…
-¿Usted piensa sus obras antes de ponerse a trabajar?
-No tengo esa capacidad, simplemente no me resulta, las cosas simplemente me salen, pero cuando avanzo una obra me puedo imaginar más o menos que será.
-Mira, volviendo a la pregunta de más atrás, este es el trabajo de un arquitecto austriaco llamado Friedensreich Hundertwasser (-me mostró un libro-)que me enseñó un amigo y me dijo: -“Uoo cuando vi a este gallo se parecía a tus trabajo”-.
-Entonces, cuando lo vi, quede loca, él tipo no se parecía a mi trabajo, yo me parecía a él, en los colores…pero él es increíble, otra cosa.
-La obra que me enseña de él, ¿todo es mosaico?
-No, no todo lo es, pero él creó casas enteras de mosaico y sí, después de ver sus obras, me gustaría parecerme a él aunque sea un poquito jaja.
-Aunque considero, que una de mis cualidades es poder combinar bien los colores, porque las personas que viene a mi taller o que me encuentra en ferias, me dicen: -“oh, cómo lograste combinar esos colores”-.
-¿Qué herramientas suele usar en sus obras?
-Utilizo tenazas, cortador de vidrios y separador, aunque también los martillos, ya que así empecé con los mosaicos.
-En cuanto a los martillazos, es un corte súper loco el que da, es interesante, y logré llegar a un punto que casi me salían las piezas que necesitaba, porque enloquecí y me hice un mural gigante en mi anterior casa, aunque después de vender esa casa, la señora que la compró decidió quitar el mural porque no le gustaba el mosaico.
-¿Cómo se sintió al respecto?
-Fue un desprendimiento doloroso, pero lo hice no más. Vendí la casa y me fuí, aunque nunca supe si sacó el mosaico jaja…al menos fue un muro de práctica, en donde hice muchas cosas.
-Los apegos en este oficio no sirven.
-¿En dónde muestra sus trabajos?
-En una feria, que se hace todos los años en el Palacio Carrasco de Viña del Mar, organizado por Sercotec llamado “Manos Maestras” hace como quince años.
-En este año, estoy en el proceso de selección, ya que se postula cada año y si pasó la postulación en línea pasó al cast…
-Hubo una época en que postularon muchos artistas y calificaron con notas y la mía fue muy baja, también coincidió que mi mosaico era muy primitivo, pero como era la primera en la lista de espera y se abrieron nuevos cupos, me dieron una oportunidad.
-A veces pienso que esas convocatorias, cuando hay calificaciones, no determinan bien la calidad de un artista…
-Exacto, aunque cuando supe mi nota quede destruida, pero después se me pasó. Pero sucedía algo…yo me encontraba en el límite ente artesanía y diseño.
-Según la Unesco, artesanía es transformar la materia prima y como yo no lo hago, sino trabajo con cerámicos importados de distintas partes del mundo caigo en la categoría de manualidad.
-¡Pero, no caigo en la manualidad, porque soy diseñadora! Entonces, he asistido a ferias en que me califican como manualidad, como diseñadora o artesana, por lo tanto no me puedo definir en ninguna de las tres áreas jaja.
-¿Usted posee una disciplina en su trabajo?
-Si poh, a veces se me pasa la mano. De repente no paro ni sábado ni domingo. Mi disciplina va de la mano con el horario de clases de mis hijos, porque me tengo que levantar temprano, hacer almuerzo, etc.
-Por lo general, comienzo a trabajar a las nueve de la mañana y no paro hasta que tengo que hacer el almuerzo y después varia si es que tengo que dar clases o no, pero básicamente mi horario termina a las nueve de la noche.
-¿Termina agotada?
-No, es que estoy tan entretenida, aunque igual hago mis pausas.
-Al respecto de sus creaciones ¿Qué cosas curiosas le ha sucedido en cuanto a la realización de un proyecto?
-En la Plaza Aníbal Pinto, se encuentra el Café del Poeta, y ahí se encuentra un mural que realizamos tres mosaiquistas, a mí me tocó hacer la Casa de la Sebastiana.
-Pero estaba a cargo del diseño la Ximena xx, quien me contrató para hacer una parte del mosaico y nosotros lo estábamos fraguando cuando Jorge Sharp ganó las elecciones.
-jaja la gente estaba así “Uahh”, contenta, porque ganó, pero ¿sabes qué pasa? El dueño del Café del Poeta, era amigo del Jorge Castro, y nosotros tuvimos una reunión como dos semanas antes con él.
-Castro dijo que si ganaba, iba a mosaiquear toda la Plaza Aníbal Pinto y eso lo íbamos hacer nosotros, y yo me dije “él sé da por sentado que va a ganar”…jaja entonces cuando ganó Sharp, nosotros nos reíamos y decíamos:-“cagamos, no tenemos más pega”-.
-Jaja, que pena.
-A Sharp no le gustaba esa idea, además estaba Monumentos Nacionales que no permite que se realicen este tipo de cosas en las fachadas que son patrimoniales, va contra la ley.
-¿Cuál es su estilo en el mosaico? Ser abstracta, crear perfiles…
-No es mi fuerte, ósea no son mis ganas crear rostros, figuras, frutas o animales, pero ha sido una experiencia súper agradable.
-¿Usted dibuja antes de hacer un mosaico?
-Sí…
-¿Hay que saber dibujar para hacer mosaicos?
-Pues sí, es algo esencial. Pues te puedo dar un ejemplo de un mosaico muy bello, que está en Santiago, que se llama “Las cuatro reinas”.
-Posee un diseño de lujo, es hermoso, se encuentra en la estación del metro del Parque O´Higgins, entonces el diseño es algo primordial.
-¿Le han pedido algo inusual?
-Una vez, me pidieron hacer una lápida, para un cementerio porque querían algo más bonito para sus difuntos.
-Pero, yo me decía “Dios mío, ¿cómo hago esto? Jaja. Al final, me quedo algo súper bonito, pero aún no lo he publicado.
-¿Qué recomiendas aparte de ciertas técnicas para hacer mosaicos?
-Pues en una ocasión, le dije a una chica que no olvidara firmar y poner fecha al mosaico, porque aunque sea lo mínimos tú puedes encontrar al artista…
-Eso es todo un tema, porque hay un montón de mosaicos que se hicieron y no hay firmas, no puedes conocer sus historias y sería buenos rescatarlos.
-A todo esto ¿Siempre hay espacios para mosaicos?
-Sí. Lo que pasa es que hacer un mural es caro, no es algo barato, ya tienes que pensar que el metro cuadrado vale entre 250 a 300 mil pesos, listo…fraguado, pegado, etc.
-Además, debes pensar que el artista queda con todas las manos destruidas, es todo un tema físico…
-Creo que con lo que me dices, es un arte que mejor disfruto contemplado.
-Piensa en l siguiente, en el caso de la pintura, en un par de años se deteriora y la debes retocar, en cambio el mosaico a no ser qué venga alguien y le haga daño, dura muchísimo más.
-¿Usted se siente satisfecha con lo que ha realizado? O ¿desearía incursionar en otra área artística?
-Por el momento estoy intranquila, quiero más jaja pues desearía incursionar más en lo que es el arte, ya que cuando me establecí bien, me sumergí en lo que son los objetos del hogar.
-Al principio era hacer bello a algo simple, pero eso no posee más evolución para mí en estos momentos.
Jueves 26 de julio de 2018/Entrevista #22
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