VALPARAÍSO-.En esta entrevista destacamos a Gabriel Canelo Cancino un joven dirigente que logró organizar y re activar la Junta de Vecinos (JJVV) N°24 “Basilio Rojas” del cerro Yungay de Valparaíso.
Fue una extensa conversación con el periodista y oriundo de San Felipe que nos planteó sobre la importancia de la organización vecinal, la comunicación y el trabajo en terreno.
Canelo, perteneciente al Partido Comunista (PC), confesó que no imaginó que convertirse en el presente mandamás de su organización vecinal resultaría difícil, esto debido a las dificultades que sorteó tras el estado de abandono de la JJVV, las firmas que tuvo que reunir para la re activación y tolerar los burocráticos protocolos que atrasaron su candidatura, entre otras trabas.
-¿A raíz de tu experiencia como dirigente estudiantil, eso te motivo para ser dirigente en tu barrio o hubo otros motivos?
-No, mis motivaciones son siempre estar organizando a los territorios o a las distintas carreras como cuando estaba en la U.
-La idea de poder organizarnos, es poder resolver las problemáticas de forma colectiva. Entonces, siempre la organización es fundamental para poder generar presión hacia las autoridades, para poder también auto gestionar nuestras propias soluciones.
-La JJVV Basilio Rojas ¿Estaba ya creada? O ¿tú la creaste?
-Bueno, la verdad que la JJVV es bastante antigua, del final de los años 60, creo que fue fundada el año 1968 o 1969. Después vino la Dictadura y barrió con todo eso (la organización de los vecinos), que tenía que ver con la organización de bases y el tejido social.
-Se cortó mucho la confianza entre los vecinos, poder conocerse, conversar, entonces recién en los ´90 la JJVV volvió a tener un rol súper importante, por lo menos acá. Ya que, pavimentaron las calles, lograron hacer un colector que uniera a todas las casas con el desagüe, se instalaron casetas sanitarias cuando estaba Hernán Pinto (DC) como alcalde. En esos tiempos las necesidades eran distintas, eran generar más servicios.
-Cuando llegué al barrio el año 2020, la JJVV estaba desactivada, por lo menos cinco años sin directiva. Los vecinos intentaron reactivar la JJVV, pero se encontraron con barreras burocráticas.
-¿Cómo lograste tú, después de haber llegado en 2020, convencer a los vecinos en generar confianza en ti después de tantos años que estuvo inactiva la JJVV?
-La verdad, me ayudó harto la Unión Comunal de JJVV de Valparaíso, es súper activa. Y en ese tiempo, en el año 2021, hicieron un congreso en donde podían participar las JJVV que estaban tanto activas como las que estaban inactivas. Uno de los objetivos del congreso era activar las JJVV que estaban inactivas, el caso nuestro, por ejemplo.
-Recuerdo que nos reunimos por “zoom” y fue algo difícil convencer a la gente que usara zoom porque estábamos en plena pandemia. No era fácil poder juntarnos en un lugar con la gente. Bueno, hicimos el zoom, al principio fueron diez personas y dentro de las resoluciones que salió de ese congreso fue reactivar nuestra JJVV. Todos sabían que era importante tener una JJVV activa.
-En ese tiempo, recuerdo que estaban entregando unas cajas de mercadería en el segundo gobierno de Piñera. Nosotros, por no tener JJVV, no pudimos acceder a esas cajas porque no había nadie con quién establecer un vínculo desde el gobierno. Y jodimos.
-Todas esas cosas hacen que la gente tenga la necesidad de organizarse para tener a sus dirigentes y directivas andando bien.
-Una de las problemáticas que nos planteaste previo a la entrevista fue la falta de comunicación, luego la desorganización de los vecinos, pero en estos momentos ¿Cuáles son las problemáticas de tu sector?
-El colectivo 41 (que es una problemática en común con las otras JJVV del sector que colindan con la N°24) es el medio de transporte más rápido que tenemos, además de las micros, pero te dejan abajo, en la Av. Alemania.
-Los colectivos andan muy rápido, han atropellado a perros y a gatos. Entonces, los vecinos tienen miedo que puedan atropellar a un niño o algún adulto mayor.
-Así que nos juntamos con las otras JJVV y redactamos una carta y esperamos reunirnos con la línea de colectivo para poder conversar sobre el tema y que también por la bulla, ya que pasan rajados como hasta las once de la noche mientras algunos vecinos duermen.
-Nosotros, los vecinos, queremos poner señaléticas y lomotoros que son una de las peticiones más centrales que ha tenido la comunidad desde que llegué. No es una cosa fácil, porque primero hay que elevar una solicitud a la municipalidad, empezar con los trámites y después tienen que hacer una licitación que en esta etapa muchos proyectos se han caído desde el municipio.
-Hace poco pusieron como 70 lomotoros en algunos lugares como en Placilla o en Miguel Ángel, entonces los vecinos me pasan preguntando:-“¿Qué onda? Y ¿Para cuándo acá?”-. Ya va un año de eso y no hay muchas luces que puedan salir esos lomotoros por aquí.
-Aparte de ese problema que poseen con la línea 41 por el exceso de velocidad de los colectivos que les genera desconfianza ¿Qué otros conflictos latentes tienen ustedes como vecinos?
-La basura. Es un tema súper complicado. El camión pasa los viernes y los martes, pero hay lugares a los que no llega, sobre todo en Basilio Rojas alto. El camión a veces no puede subir porque la calle es muy estrecha y siempre está lleno de autos estacionados que para que pase el camión, los vehículos deben esconder el espejo retrovisor y por un centímetro, al no esconderlos, el camión no sube (por lo estrecho del paso) lo que genera un reclamo constante de los vecinos.
-¿Qué cambió en ti después de convertirte en presidente de una JJVV?
-Es harto trabajo. En la semana le estoy dedicado unas dos o tres tardes para hacer trámites, gestiones u organizarnos. Pero, siento que es necesario y hay que hacerlo porque si no hay JJVV no hay organización, y si no hay organización la verdad todo se va ir desprendiendo y desmoronando. Se nota cuando en un territorio hay JJVV y cuando no. Espero poder motivar a más gente para que se puedan ir sumando, sobre todo a la juventud, porque quizás yo me cambié de casa o me vaya a otra ciudad y alguien tiene que quedarse en la JJVV.
-Ustedes rescataron una fiesta de navidad que destacaste en Instagram, ¿eso se había perdido por la desorganización?
-Se había perdido porque murió un vecino, “Juanito”, que era el que motivaba a toda la gente, a los niños y a los adultos.
-Juanito murió el año 2022, pero ya estaba muy enfermo desde 2017 y él era que se disfrazaba de “Viejito Pascuero”, él era que juntaba a la gente, él era que los hacia bailar o dinámicas. De hecho, también se vestía de payaso y hacia sus rutinas. Acá, en el barrio, muchos niños crecieron con su ejemplo y también se convirtieron en payasos. Él desde los años 90 estaba siempre organizando a los más jóvenes para poder hacer celebraciones en el barrio. Y una de esas celebraciones era la navidad. Él juntaba a todos los niños para entregarles dulces, hacían juegos y era algo muy importante su labor.
-Ahora, quisimos retomar estas fiestas que es una tradición del barrio y resultó bien, fue harta gente (muchos niños y niñas) que igual hoy en día es algo bastante complejo juntar porque tenemos en contra a los videos juegos, el internet y al celular, y eso te va haciendo más individual, siempre encerrados en las casas. Había vecinos (antes la fiesta de navidad) que decían que no había niños en este barrio, pero nos dimos el trabajo con la JJVV de poder ir casa por casa para inscribir a todos los niños que tenían menos de 10 años para un catastro para los juguetes. Habían alrededor de cincuenta niños en el barrio, que igual es un número interesante.
-¿Cómo es la relación que ustedes poseen con la municipalidad de Valparaíso?
-Es buena igual. Tenemos atención constante. Trabajamos con la “OMZ” que es la Oficina Municipal de Zona que en Valpo hay más de diez o quince, en donde canalizamos todas nuestras inquietudes, preocupaciones y proyectos a través de la OMZ. Nos juntamos con ellos, dialóganos las problemáticas que poseemos y todo lo que vaya pasando es con ellos. Aunque, igual a veces hay trabas, canales que se deben mejorar, pero en general es una muy buena relación y la municipalidad está con la idea de potenciar a las organizaciones vecinales, deportivas, culturales, todo.
-Para ti ¿Cómo ha sido esta experiencia?
-Esta oportunidad se dio. La JJVV estaba súper botada cuando llegué y altiro empecé a preguntar “¿qué onda?”. A medida que fue pasando el tiempo fui motivando a los vecinos para organizar una JJVV.
-La primera vez que lo intentamos hacer la elección no se pudo porque no alcanzamos con los candidatos, porque necesitábamos a seis personas y sólo nos conseguimos a tres. Y yo no podía inscribirme como candidato aún porque no tenía el año de antigüedad que es uno de los requisitos para poder ser candidato oficial para la JJVV.
-¿Qué cualidades debe poseer un presidente de JJVV?
-Ser motivado y tener energía porque siempre hay que estar en terreno, mirando lo que está pasando en el barrio, cuáles son las problemáticas de los vecinos y estar pendiente.
-Yo voy constantemente a todo el barrio, pasamos casa por casa, entrego la información cara a cara. Y ahí, los vecinos me van contando cuáles son las problemáticas, qué es lo que están viviendo, sus preocupaciones y en base a eso vamos haciendo soluciones o intentar a llegar cómo resolver las problemáticas.
Desde la llegada de Gabriel Canelo al sector, y siendo fiel a las creencias de su partido en cuanto organizar a los territorios, el joven dirigente logró incentivar la participación de muchos vecinos a las actividades de la JJVV, fortaleció la relación con otras entidades de igual importancia aledañas a su calle y hasta lograron adjudicarse un Fondeve que les permitió reforzar la seguridad de los hogares con alarmas comunitarias que ya se han activado, delatando algunos delincuentes que pretendían hacer de las suyas o que se han activado de manera casual por involuntarios errores de los propios vecinos.
De igual modo la estrategia de nuestro entrevistado de ir puerta por puerta, por toda la calle Basilio Rojas, no sólo les ha permitido realizar un trabajo en terreno, para dar a conocer las actividades de su JJVV, sino también les ha permitido que sus propios vecinos conozcan a la directiva que lo conforman y que se encuentran ahora preparando algunos talleres para toda la comunidad, entre ellos el “taller de boxeo” que aún está a la espera de los fondos requeridos para su realización.
Sobre la JJVV N°24 Basilio Rojas
En cuanto a la JJVV que representa nuestro joven entrevistado, esta se encuentra ubicada en la calle Basilio Rojas que inicia a los pies del mirador Camogli, colindante con la Av. Alemania, y que converge con el final de Guillermo Rivera para convertirse en una sola calle, de dos direcciones, que llega hasta lo más alto del cerro Yungay de la ciudad Puerto.
La directiva, aparte de Gabriel Canelo, se encuentra conformada por Aldo Piraino en secretaria y por Georgina Pardo en tesorería, con quienes ha conformado un buen equipo, se han delegado las funciones en donde cada uno cumple distintos roles.
Para el joven dirigente comunista y de acuerdo a profundas convicciones “las transformaciones sociales se logran estando organizados”, concluye. Si deseas conocer a Gabriel Canelo lo puedes hacer siguiéndolo a través de su cuenta de Instagram.
Miércoles, 7 de febrero de 2024/Entrevista #120
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