Resulta que cuando me convertí en mamá, también quedaron atrás otras actividades sociales, como juntarse con amigas, salidas nocturnas, etc.
Es obvio, porque las prioridades cambian, y de ninguna manera dejaría a mi hija llorando por dormir conmigo, sólo por salir “de carrete”.
Tu hij@ es lo que más importa en el mundo, y tu deber es estar para ella/él en todo momento, a toda hora. Todo lo que digo debería ser obvio, pero lo que no me resulta tan obvio es que tus amistades a veces no entiendan o empaticen con la situación, y demuestren la amistad siendo más flexibles, que se muevan más ellas a verte, cosas así.
Quizás no verse con la frecuencia de antes, pero tampoco dejar pasar meses en ello, para mí es algo fome y descortés.
Quizás este texto es más bien un descargo, pero es algo que más de alguien se identificará. Cuando te pasa a ti, te das cuenta lo que vale un gesto así. Quizás cuando vivan tu experiencia, aprendan.
Pero sería lindo que las personas que escogiste para que estuvieran en tu vida, no se perdieran una parte tan importante de ella solo por “dejación”, o porque quizás no les gusten los niños.
Todos fuimos, y cuando les toque tener el propio no querrán sentirse así.
Cada etapa que uno vive con las personas correctas son valoradas, por eso no se pierdan de la vida de las personas solo porque sus actividades ya no sean las mismas, es una etapa temporal, y cuando ya exista el tiempo como antes, uno escogerá estar con los que estuvieron cuando lo necesitaste.
Jueves, 26 de Septiembre de 2019
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